miércoles

Cuento Motor

Un lobo encontró llorando en la selva a un cachorro de hombre que había sido abandonado. Lo llevó a su guardia y la loba lo crió junto con sus lobitos. Lo llamaron Mowgli. 

Un día Shere Khan, el temido tigre, se asomó a la guarida y prometió comerse a Mowgli al menor descuido, pues odiaba a los hombres. 

Akela, el lobo gris, Bagheera, la pantera negra, y Baloo, el sabio oso, enseñaron al niño los secretos de la selva. Y Mowgli aprendió el idioma de los animales, a nadar, correr y trepar. 


Una tarde, los monos charlatanes lo raptaron y lo llevaron a la ciudad antigua. Después de una larga pelea, Baloo, Bagheera y Kaa, la pitón, que hipnotizaba con su danza, lo rescataron. 


Pasó el tiempo. Un día, el tigre Shere Khan reapareció más fiero que nunca, dispuesto a cumplir su promesa de despedazar al cachorro de hombre. Pero Mowgli ya no era un ser indefenso: mandó a dos manadas de búfalos contra él, y el tigre murió aplastado. Así fue como el cachorro de hombre, junto a su amigo el elefante Hathi, se convirtió en el nuevo rey de la selva. 


Y un año más llegó la primavera, y Mowgli se encontró por primera vez en su vida solo y triste, y lloró. 
Descubrió a lo lejos la aldea de los hombres. Vio el humo de las hogueras, oyó los cantos y las risas y sintió un gran deseo de acercarse. 

Bagheera, Baloo, Kaa, Akela y Hathi le explicaron que cada uno debe vivir con los de su especie para ser feliz y que, como él era un hombre, debía vivir en la aldea. 

Le cantaron la canción de la despedida y le dijeron que quizá allí encontraría a su verdadera madre, y quizá..... también encontraría una compañera. 


Al acercarse al poblado, Mowgli empezó a ver chicos y chicas como él, y no se sintió tan solo. Para él empezaba una nueva vida, pero nunca olvidaría a sus amigos.